En medio de un año desafiante para la economía mundial, el sector minorista en Brasil ha experimentado altibajos en su desempeño. Sin embargo, una reciente pesquisa realizada por Stone, empresa de tecnología financiera, revela que el varejo nacional tuvo una leve caída del 0,2% en noviembre en comparación con el mes anterior. A pesar de esto, el resultado es considerado positivo por los expertos, ya que muestra una recuperación en el sector tras las fuertes caídas registradas en meses anteriores.
Según el índice de Stone, el comercio digital fue el más afectado en noviembre, con una caída del 8,8% en comparación con octubre. Por otro lado, el varejo físico tuvo un crecimiento del 1,7%, lo que demuestra una recuperación en las ventas en las tiendas físicas. Dentro de este segmento, el de Hipermercados, Supermercados, Produtos Alimentícios, Bebidas e Fumo fue el que más se destacó, con un aumento del 5,3% en sus ventas.
Este resultado es muy alentador para el sector minorista, ya que demuestra una reactivación en las compras en tiendas físicas, lo que refleja una mayor confianza del consumidor en la economía del país. Además, es un indicador de que la estrategia de las empresas minoristas de diversificar sus canales de venta, combinando el comercio físico con el digital, está funcionando y permitiendo una mayor adaptación a las necesidades de los consumidores.
Otro factor que contribuyó al crecimiento del varejo físico en noviembre fue la celebración del Black Friday, una de las fechas más importantes para el comercio en Brasil. A pesar de la pandemia, las ventas en esta fecha alcanzaron un récord de R$4,02 mil millones, lo que supone un aumento del 6% en comparación con el año anterior. Este resultado demuestra que los consumidores brasileños están dispuestos a gastar en productos y servicios, siempre y cuando encuentren buenas ofertas y promociones.
Además, la pesquisa de Stone también revela que el ticket promedio de las compras en el varejo físico aumentó en un 2,8% en noviembre, en comparación con el mes anterior. Esto indica que los consumidores están dispuestos a invertir en productos de mayor valor, lo que es una buena señal para el sector minorista.
Otra tendencia que se ha observado en el sector minorista durante la pandemia es el aumento en las compras en línea. Sin embargo, en noviembre, el comercio digital experimentó una caída del 8,8%, lo que puede ser atribuido a la recuperación del varejo físico y también a la estabilización de los precios después de las promociones del Black Friday. A pesar de esta caída, el comercio digital sigue siendo un importante canal de ventas para las empresas minoristas y se espera que continúe creciendo en los próximos años.
En resumen, la pesquisa de Stone demuestra una recuperación en el sector minorista en noviembre, con un crecimiento del 1,7% en el varejo físico y una caída del 8,8% en el comercio digital. Este resultado es una señal positiva para la economía brasileña, ya que muestra una mayor confianza del consumidor y una adaptación exitosa de las empresas al nuevo contexto de pandemia. Además, el éxito del Black Friday y el aumento del ticket promedio de las compras son indicadores de que los brasileños están dispuestos a gastar en productos y servicios, lo que es una buena noticia para el sector minorista. Se espera que esta tendencia continúe en los próximos meses y que el sector minorista siga siendo un motor clave para la recuperación económica del país.