El Índice de Atividad Nacional de Estados Unidos (NMI) experimentó una disminución drástica en el mes de octubre, según el Federal Reserve Bank de Chicago. El índice fue de -0,49, su nivel más bajo desde 2017. Esta caída se dio como resultado de la reducción en todas las cuatro principales categorías de indicadores, según la Investigación Económica de Chicago, y corrobora la preocupación de los economistas acerca de la economía de Estados Unidos.
La categoría de gastos de los hogares disminuyó 1.3% en comparación con la lectura del mes de septiembre. Esta lectura equivale a la más baja desde febrero de 2019. Otro factor que contribuyó al resultado negativo fueron los indicadores de oferta de trabajo, que tuvieron una disminución del 0.8%. Sin embargo, las condiciones de trabajo subieron ligeramente durante el mes, con una variación de 0.2%.
Los niveles de empleo y el nivel de producción también disminuyeron desde septiembre. Esto, junto con la aceleración de los precios al consumidor, contribuyeron a un resultado negativo para el índice de difusión. Los economistas también señalaron la volatilidad de los mercados financieros como un factor contribuyente a la disminución del NMI.
A pesar de la caída en el NMI, se espera que la economía de Estados Unidos empiece a recuperarse de manera gradual a comienzos del próximo año. El personal minorista sigue contratando para cubrir el aumento de la demanda durante el fin de año, lo que garantizará el crecimiento gradual de los datos de la economía. Mientras tanto, el sector empresarial seguirá invirtiendo en tecnología y capacitación para mejorar la productividad y la eficiencia.
El banco central ha seguido implementando medidas para reducir la incertidumbre, como la expansión y la estabilización del sistema financiero. Además, el aumento del gasto federal, los avances en la aprobación de la vacuna Covid-19 y el mejoramiento de los modelos de distribución de la misma son algunas de las razones por las cuales se espera que la economía comience a estabilizarse y se recupera de manera gradual en el próximo año.
El Federal Reserve Bank de Chicago ha señalado que los consumidores siguen preocupados por la situación de salud y los niveles de desempleo. Esta incertidumbre podría ser un factor clave en el resultado del índice NMI de octubre, y una señal de que la economía de Estados Unidos seguirá enfrentando problemas a largo plazo. Los economistas recomiendan mantener una perspectiva pragmática y centrarse en lo que se puede controlar, como la reducción del desempleo, el mantenimiento de los precios estables y el mejoramiento de la oferta de productos que permitan mayor eficiencia y